lunes, 28 de octubre de 2013
Pizarra Digital
En los últimos años la Pizarra Digital Interactiva (PDI) se ha convertido en la principal protagonista dentro del aula. Tenemos ante nosotros una herramienta con gran capacidad de comunicación de ideas y de probada efectividad docente.
Habrá lectores que nunca hayan hecho uso de esta nueva tecnología, la primera pregunta a plantearse es ¿Cómo puedo comenzar a usar la PDI?.
Tras las primeras experiencias en el uso de la PDI en el aula es necesario continuar realizando ciertas reflexiones ¿La utilizo adecuadamente? ¿Cómo puedo sacarle el máximo partido a esta nueva tecnología en mis clases?
Este artículo pretende servir de acompañamiento al profesorado para la introducción de la PDI en el aula así como una guía para el uso eficiente de esta tecnología.
El docente ha de conocer a grandes rasgos las características del nuevo sistema tecnológico y adquirir destrezas para resolver de forma autónoma pequeños problemas técnicos que puedan surgir en su trabajo diario usando la PDI.
El profesorado ha de realizar una reflexión profunda que le permita comprender la utilidad didáctica y el cambio metodológico que conlleva el uso de la PDI en el aula.
Seguidamente el reto que se plantea es el de comenzar a introducir la PDI en el aula. Comenzar a usar la PDI es fácil pero superada esta barrera iremos descubriendo diferentes estrategias didácticas y los procedimientos para realizar tareas y afrontar retos cada vez más complejos.
Paso número 1. Pequeño recorrido por la historia: de la pizarra verde a la pizarra digital interactiva
El primer paso para la introducción de la PDI en el aula debe de pasar necesariamente por conocer qué es exactamente una PDI y qué cambios a nivel técnico supone su introducción en el aula.
¿De dónde partimos y hacia dónde vamos?
La mayoría del profesorado proviene de un contexto escolar donde se han venido usando de manera generalizadas las pizarras tradicionales. Migramos hacia un nuevo escenario donde irrumpe en el aula una nueva tecnología: la pizarra digital interactiva o PDI.
A lo largo de estos años, la gran mayoría del profesorado ha convivido con diferentes tecnologías en cuanto a la pizarra de clase se refiere.
Dando un paseo por la historia podemos hablar de:
La pizarra verde + tiza
La pizarra verde tradicional se ha venido usando desde antaño y aún hoy sigue siendo la protagonista en muchos contextos escolares.
La herramienta básica para el uso de la pizarra verde es la tiza.
La pizarra blanca + rotulador
En muchas aulas la pizarra blanca sustituyó a la pizarra verde tradicional.
La adaptación del docente a la pizarra blanca no supuso problema alguno puesto que los procedimientos a seguir eran similares y simplemente hubo que sustituir la tiza por un rotulador.
La pizarra blanca + ordenador + proyector: La pizarra digital (PD)
En algunos rincones del centro educativo se realizó la primera inclusión al mundo digital desde el aula, incorporando un sistema formado por un ordenador y un proyector que proyectaba sobre la pizarra blanca, [5].
Los componentes básicos de la pizarra digital son el ordenador y el proyector.
Imagen obtenida del blog de Pere Marqués
La introducción de la PD en el aula supone un cambio más importante en cuanto al uso de las nuevas tecnologías. El docente ha de poseer nociones básicas para el manejo del ordenador y conocer mínimamente el funcionamiento del proyector ya que éstos pasan a ser sus nuevos instrumentos de trabajo.
El uso de esta tecnología en el aula implica además la proyección de contenidos digitales. En muchos casos el profesorado continúa usando la pizarra verde o blanca como apoyo a la PD, o viceversa.
Pizarra blanca interactiva + ordenador + proyector: La pizarra digital interactiva (PDI)
Imagen obtenida del blog de Pere Marqués
La gran “revolución” llega al aula con la introducción de la PDI.
La PDI supone la combinación, en una sola tecnología, de funcionalidad de todos los elementos descritos anteriormente.
Los componentes básicos de esta nueva herramienta son el ordenador, el proyector y una superficie que además de servir de soporte para la proyección es una superficie interactiva.
En función del modelo de pizarra digital, la interactividad la puede proporcionar la propia superficie plana o un complemento tecnológico anexo al sistema.
En cualquiera de los casos, la PDI ofrecerá al profesorado la posibilidad de proyección de contenidos sobre una superficie interactiva permitiendo:
La comunicación con el ordenador desde la propia PDI: un clic con el dedo o puntero, en función del modelo de PDI, equivaldrá a hacer clic con el botón izquierdo del ratón.
Hacer anotaciones o escribir sobre la proyección.
Interactuar sobre diferentes recursos u objetos digitales educativos.
El profesorado podrá realizar todas sus explicaciones en la PDI puesto que ésta agrupa tanto la funcionalidad de la pizarra tradicional como la funcionalidad de la PD.
Paso número 2. Comprender la utilidad didáctica y el cambio metodológico que conlleva el uso de la PDI en el aula
Reflexionemos
El siguiente paso nos sitúa ante la necesidad de comprender la utilidad didáctica del uso de la PDI y analizar qué cambios metodológicos conlleva su introducción en el aula.
La PDI no ha de plantearse en principio como un sustituto de la pizarra tradicional sino como un complemento ya que no sólo abarca toda su funcionalidad sino que además la amplía.
La introducción exitosa de esta nueva tecnología en el aula supondrá necesariamente un cambio de metodología.